Parques de aventura en Navarra

Ojito con las atracciones que son una fantasía. Y perfectas para todos los públicos: desde los más tranquilos hasta los más osados.

Si te apetece disfrutar con tranquilidad y rodeado de agua puedes empezar con las barcas del lago, los bumpers, los rápidos, el laberinto de agua, o montarte en los potrillos y jugar a un montón de juegos ideales para peques... y si buscas un poco de emoción y aventura no te pierdas la Gran Tirolina, el Bobsleigh, La leyenda de Roncesvalles, la mansión encantada, las sillas voladoras o los Gritos de la Naturaleza… 

¡Vaaamos que nos vamos!

Los encontrarás agrupados en distintos espacios que puedes recorrer a través de varias sendas.

Tienes por ejemplo la Senda Ganadera —con caballos de Burguete y jacas navarras—, la Senda de la Granja, el Aviario o la Senda de los Exóticos —con canguros, tigres y cebras—. Y así hasta 8 sendas distintas.

Si te gustan los animales, te costará elegir por dónde empezar.

Y sigue la diversión con espectáculos para personas de todas las edades.

El Show de Bienvenida, el Secreto del Chamán, el teatro de marionetas y hasta una función circense que sacarán más de una sonrisa a toda la familia. 

Las instalaciones son de lo más completas para que no te tengas que preocupar de nada: 7 restaurantes con todo tipo de comidas, un amplio parking (también con servicios para autocaravanas), accesibilidad para sillas de ruedas y carritos y consigna, y una tienda donde hacerte con tus recuerdos favoritos.

¡Ah! y un alojamiento de lo más curioso —recreado como si fuera un bosque— por si decides hacer noche para conocer el parque a fondo.

Un espacio donde la diversión no acaba nunca.

Mira, el parque cuenta con un montón de actividades para todos los públicos, desde rutas temáticas —de los sentidos, mitológica, de aventura—, pasando por arborismo, puente tibetano, tirolinas,  péndulo, laser tag, o disc golf, hasta un circuito de pump track.

Más alguna cosita que nos hemos dejado para despertar tu curiosidad. ¿Qué será, será? 

Como te hemos adelantado, esto es un resort, lo que significa que todo lo que puedas necesitar lo encontrarás en sus instalaciones.

Tres tipos de alojamiento: un albergue de lo más colorido perfecto para grupos, un hotel de tres estrellas, situado en un antiguo palacio, que mezcla como nadie tradición y modernidad y unas cabañas de lujo que son el summum de la escapada romántica.

Además, dos restaurantes, uno informal y otro de autor, que serán tu mejor recompensa tras un día de cañita aventurera.

Y espera, que si por un casual quieres organizar un evento en Navarra —de empresa o familiar— tienen un espacio, el Mirador de Yrisarri, especialmente diseñado para ello.

Este parque, junto a Elizondo, hará que te suban las pulsaciones y te tiemblen las piernas con sus propuestas.

Dos circuitos de tirolinas, uno para personas adultas y otro para peques, una vía ferrata con vistas de impresión, un megapéndulo con una caída de 142 metros —glups—, varios senderos y un circuito de cañón-aquapark natural entre toboganes y pozas.

Lo dicho, tu corazón se va a poner rumbero.