Accesibilidad visual en Turismo de Navarra

En el Centro de Interpretación de la Naturaleza de Ochagavía, el equipo de atención está formado en trato e interacción con personas con discapacidad visual. Aunque no tienen materiales específicos con braille, disponen de reproducciones de aves y de una maqueta de esa zona del Pirineo que usan para ofrecer las explicaciones a quien tiene dificultades visuales.
En la primera planta, hay un panel que reproduce el canto de las diferentes aves que habitan la Selva del Irati. En la segunda planta, es posible seguir bien casi todo el audiovisual aunque no lo veas.

En el embalse de Leurtza, cercano al valle de Baztan, hay un sendero de 2 km de dificultad baja que rodea el embalse inferior y que dispone de medidas de accesibilidad visual. El recorrido está marcado con un zócalo de madera en la parte izquierda, para que sea fácilmente detectable por los bastones blancos. Está equipado con bancos, áreas de descanso y señales informativas sobre la dirección y aspectos recomendados para observar. También hay placas informativas en relieve y braille.

Este lugar, como tantos entornos naturales, no cuenta con ninguna adaptación específica para personas con dificultades de visión, pero resulta muy especial para quienes no puedan ver y tengan costumbre de hacer senderismo en compañía. La ruta no tiene dificultad más allá de algunos escalones y saltos de pequeñas regatas, pero exige un calzado adecuado con sujeción de tobillo para quien tenga dificultades visuales. La recompensa es caminar por las entrañas de un bosque, junto a un cauce refrescante, nervioso y saltarín al alcance de las manos. Aguas que desalojan el enorme acuífero de la sierra de Urbasa. 

El Centro de Interpretación del Señorío de Bertiz tiene guías en braille y en el jardín hay una enorme secuoya que se puede abrazar, ya que su base está rodeada por una pasarela.

Además, existe un sendero sensorial de 450 metros creado para experimentar el oído, el olfato y el tacto. Dispone de una cuerda de seguimiento en un lateral, un pupitre que informa con elementos táctiles y visuales, unas trompetas auditivas que ayudan a escuchar los sonidos amplificados de la naturaleza y unas lanzaderas táctiles que invitan a tocar y oler los elementos de la naturaleza, como la madera muerta, el musgo o los helechos.

El parque ofrece cinco rutas: Aizkolegi, Plazazelai, Urrestarazu, El Suspiro e Iturburua. Todas ellas parten de la pista principal que se adentra en el bosque. La pista primero está asfaltada unos metros y el resto de suelos van desde la senda estrecha del Suspiro a la pista ancha y pedregosa de la parte alta de Aizkolegi. En cualquier caso, muy accesibles a diferentes estados de forma física y habilidad senderista. Las personas con discapacidad visual han de ir guiadas por otra persona, ya que no hay elemento o zócalo lateral que las encamine.

Este parque que aúna animales, atracciones y espectáculos trabaja la accesibilidad de un modo muy decidido desde sus inicios. La señalización de los diferentes animales ha ido incorporando códigos QR que enlazan con el contenido de los paneles interpretativos, haciéndolos accesibles a personas ciegas con lector de pantalla en sus móviles. El equipo de atención del parque está formado en trato e interacción con las personas con discapacidad. Por lo tanto, en las atracciones, en las actividades divulgativas, en los restaurantes o en los puntos de información, cualquiera de sus profesionales sabrá resolver tus dudas y necesidades. 

Cuando reserves tu visita, recuerda informar de tu discapacidad visual. El equipo de guías suele estar bastante atento para ofrecer explicaciones más descriptivas y tal vez te muestre algunas estalagmitas; una de ellas mide casi un metro de alto y lleva formándose 8.000 años. Y desde hace 14.000 años, el río Urtxuma está creando la gruta por la que puedes transitar sin peligro, ayudándote de un pasamanos de cuerda en las escaleras y agachándote en algunos pasos. Hay audios que se activan al paso del grupo y que las guías van complementando con sus explicaciones. Además de las míticas lamias, los murciélagos y los lirones, en esta cueva habita una araña única en el mundo, albina y ciega.
 

En este valle, resulta imprescindible visitar el Rincón de Belagua o bosque de Mata de Haya, en el que se encuentra el Sendero de los Sentidos, de 700 metros de longitud entre un hayedo a casi 1.000 metros de altitud.  El Sendero de los Sentidos anima a tener una experiencia sensorial a través del oído y del olfato. En él, se percibe el olor a tierra mojada, el ruido de las ramas de las hayas centenarias y el sonido de los pájaros que sobrevuelan el bosque. El recorrido tiene una cuerda para facilitar la deambulación a todas las personas, en especial a las personas con discapacidad visual.

En este valle pirenaico, encontrarás un itinerario accesible en Burgui. Se trata del sendero de Basari y Foz de Burgui, que recorre la parte izquierda del río Esca y tiene forma de raqueta.
El itinerario adaptado para personas con movilidad reducida comienza en el puente medieval y continúa con el Paseo de los Oficios, pero solo llega hasta la nevera. Las recreaciones de los diversos elementos etnográficos -entre los que destaca una imponente almadía a tamaño real- están acordonadas. También tienen paneles informativos en braille, altorrelieve y con códigos QR para acceder a la información accesible. Casi todos disponen de audio para escuchar el texto.

Este robledal milenario situado en el Valle de Ultzama, a 25 km de Pamplona, cuenta con un sendero que recorre el bosque. Al inicio de este sendero se encuentra el llamado Laberinto, un pequeño recorrido de 300 metros que ofrece una cuerda guía en un lateral y diversas balizas informativas con braille.

En el Parque Natural Urbasa-Andia, hay un sendero adaptado a personas con discapacidad visual llamado sendero de Morterutxo. Su recorrido es circular y su longitud es de 800 m. En el lado izquierdo del itinerario hay un zócalo de madera que guía a personas usuarias de bastón blanco. Además, hay indicaciones en macrocaracteres, alto relieve y braille que aunque no aportan información significativa, ayudan a localizar puntos del entorno.

En Abárzuza está el recorrido Emakumeen Memoria que con sus 14 paneles interpretativos homenajean a las mujeres de la zona recordando los trabajos que estas realizaban antaño y que se van perdiendo. Algunos son: pacharán, carbonera, calera, cisco, palomera, cabaña txerris o trasmocho. También hay paneles que informan del papel de las mujeres en la histórica batalla de Abárzuza (en 1873, dentro de la tercera Guerra Carlista).
 
En Arizaleta, hay una ruta al nevero que tiene tres paneles que informan de cómo es la ruta, qué animales y plantes viven en la zona y cómo se producía nieve en el nevero.

Todos los paneles, de ambos senderos, cuentan con códigos QR que llevan a la información en formato accesible para las personas ciegas usuarias de lector de pantalla, así como para quienes tienen baja visión.

En el Museo de Navarra ofrecen un cuadernillo con las 6 piezas más relevantes del museo, en braille y en Lectura Fácil. Hay que solicitarlo en la recepción cuando se inicia la visita. Entre ellas destaca el retrato del Marqués de San Adrián, de Francisco de Goya.

En la entrada del museo hay un marcador NaviLens con explicaciones del Museo y del Campus de la Universidad, ubicado en pleno Camino de Santiago a su paso por Pamplona. El museo programa actividades para personas con discapacidad. Infórmate en su web accesible con nivel AA.

En el museo se pueden pedir visitas guiadas para personas con discapacidad. Y para las personas sin visión o con baja visión, se han colocado unas esculturas que se pueden tocar para percibir sus volúmenes y formas.

En la web del Museo de Tudela (https://museodetudela.com/) se ofrece un módulo de accesibilidad con recursos para personas con baja visión.  Además, el equipo de visitas guiadas del museo está formado en atención a personas con discapacidad.

Uno de los objetivos de esta pinacoteca es contribuir a fomentar la cohesión social a través de la cultura. Para ello, organizan visitas guiadas y actividades adaptadas a las necesidades de cada grupo para fomentar la inclusión de todas las personas, incluidas aquellas que tienen discapacidad sensorial. 

Las esculturas de madera de Xabier Santxotena expuestas en la campa donde se encuentran las 9 bordas que conforman el museo del artista, podrás disfrutar de la más sensual de las artes a la vez que conoces el pasado de un pueblo de artesanos: los agotes. Puedes leer la guía interpretativa en braille, escuchar los audiovisuales y moverte por todo el recorrido de modo autónomo gracias a los cambios de textura del suelo. Unos 90 minutos de sensaciones táctiles, de arte e historia de un pueblo imprescindible para conocer el pasado de estas tierras.

Nada más entrar al museo, en la recepción, a las personas con baja visión o sin visión, junto a a la guía en braille se les entrega un plano táctil para hacer todo el recorrido de modo autónomo si así lo desean.

Te sugerimos que informes de tu discapacidad visual y que reserves una visita guiada. Durante una hora, podrás conocer la historia y las leyendas de unas tierras con un pasado increíble. No hay elementos adaptados, pero las guías del museo te dejarán tocar algunos objetos sorprendentes como una cabeza de carnero. Con los audiovisuales reflexionarás sobre un tema inquietante: cómo el ser humano ha perseguido y castigado lo diferente y lo desconocido. Y escuchando los interactivos conocerás a las personas que fueron tomadas por brujas, muchas de ellas niñas condenadas a la hoguera.

Este museo etnográfico no tiene ni paneles ni vídeos con accesibilidad visual, pero su visita es muy recomendable porque la mayoría de los objetos expuestos se pueden tocar (sobre todo trajes y una réplica a escala de una almadía) y, en segundo lugar, porque las explicaciones de la guía son muy expresivas y aportan mucha información.

En el Museo Arqueológico y Yacimiento “Las Eretas” se trabaja desde hace tiempo para hacer accesible el entorno a todas las personas. La accesibilidad visual se ha conseguido con balizas bluetooth, a las que puedes acceder gracias a la aplicación gratuita Beepcons. Las balizas, situadas en cada uno de los paneles y en puntos estratégicos del museo y el yacimiento, contienen la información en PDF accesible, con descripciones de los elementos y de las maquetas de la exposición. También cuentan con folletos en braille.

En este peculiar museo en vivo se obtiene harina de maíz para la elaboración de los tradicionales talos, esas ricas tortas de maíz que se rellenan de chistorra, de queso y hasta de chocolate... El molinero te hará una demostración de su oficio y sentirás cómo el olor del maíz, el tacto de la harina, y el sonido del agua y de los engranajes del molino convierten la experiencia en un alarde para los sentidos. Además, puedes conocer el ancestral carnaval de Zubieta gracias al audiovisual que se proyecta en el primer piso.

Todos los paneles de la zona expositiva están recogidos en un librito en braille, con opción de PDF accesible, para que puedas consultarlo de modo autónomo. Además, los vídeos en LSE de cada panel tienen audio para que puedas escucharlos.

En el interior de esta villa, ubicada en Arellano, hay instalada una plataforma volada perimetral que permite realizar todo el recorrido sin descender al propio yacimiento, aunque si quieres bajar existen dos puntos con escaleras. Las personas con discapacidad visual pueden bajar y tocar algunas de las piezas originales.

El Centro Ultreia cuenta con un marcador NaviLens en la puerta con el que puedes acceder a información accesible. Desde la puerta hasta el mostrador de atención hay un encaminamiento podotáctil y cuentan, además, con balizas bluetooth, a las que puedes acceder gracias a la aplicación gratuita Beepcons.

En el yacimiento arqueológico de Santa Criz de Eslava, la más monumental de las ciudades romanas conservadas en Navarra, se ofrecen paneles con un diseño gráfico de alta legibilidad, así como con braille y alto relieve, para que puedan ser disfrutados por las personas con discapacidad visual. Además, se ofrecen visitas guiadas donde conocer tanto el yacimiento como la exposición.

En el monasterio hay una réplica del capitel de Carlos V. Se trata de una réplica accesible que puede ser disfrutada también mediante el tacto. Su colocación en una posición más baja que el original y la posibilidad de rodearlo completamente hacen que sea mucho más sencillo y cercano explicar las características tan interesantes que muestra la procesión en la que aparece el emperador Carlos V. Además, se ofrece otra réplica a escala reducida para que las personas invidentes puedan hacerse una idea de conjunto de la pieza y sus detalles.